¿Truco o trato?… Tienes bolsa para rato

        ¡Rin, rin! ¡Rin, rin!

        -¿Quién es?

        -¿Truco o trato?

        -Mandeee….

        -¿Truco o trato?

        -No gracias, no quiero adoptar un gato.

        -Abuelaaaaa, que ya te lo expliqué. Lo de la bolsa de chuches.

Nuestros mayores no dan crédito. ¿Esto qué es? Esqueletos, guadañas, payasos asesinos… Pero están tan contentos los chiquillos, tan felices con su sábana fantasma y sus cadenas…

Lo qué nos gusta una fiesta. Of course. No podemos evitarlo. Ya está, nos ha abducido el poder de Halloween, hay que reconocerlo. Se están frotando las manos los lobbies para introducir Saint Patrick´s Day, el Año Nuevo Chino y el Carnaval de Río. Somos una presa fácil. Nada nos pone más que anotar un fiestorro en el calendario.

Este año, a Kukuxumusu se nos ha aflojado el tornillo y nos hemos subido a este carro de monstruosidades varias. Así que hemos diseñado para Mercadona la bolsa más terrorífica para patear de casa en casa la noche del 31 de octubre.

Podríamos haber escogido a Morticia Addams, a Freddy Krueger o a la Niña del Exorcista -¡qué angélico!-, pero nos poseyó el espíritu de Mary Shelley y nuestras cabezas pensantes crearon a Frankcicatrices.

A este pobre hombre de cabeza cuadrada, ojos sanguinolentos y cara verdosa surcada de cicatrices se le ha desencajado la mandíbula. Es para que anticipes la jeta que se le va a quedar a tu madre cuando calcule tu ingesta de azúcar en cuatro horas y se acuerde de que te toca revisión con el dentista la semana que viene. Cada vez que llega la noche de los muertos vivientes, el gremio de odontólogos aplaude con las orejas.

Nuestra “Happy Halloween” mochila, decorada con maléficas calabazas, calaveras y telarañas en un siniestro bosque -a ver quién da más- es horripilantemente perfecta. El monstruo más cuerdo de la fauna Kukuxumusu va a estar presente en todos los centros de Mercadona de España y Portugal. ¡¡Ojo que hay mucho murciélago por ahí suelto y son unidades limitadas!! Espabila, que te quedas sin la tuya.

Todo son ventajas. De entrada, ya te llega rellena con un surtido de tres bolsitas de chicles, regalices blancos y fantasmas azules. Ideal para “halloweenenses” tirando a vagos que lo mismo deciden quedarse en casa. Como lleva cuerdas, directa a la espalda, que te va a venir muy bien tener las manos libres para pelar, en cero, coma dos, piruletas, chocolatinas y “guarrindongadas”. Tú te giras, el adulto introduce la mercancía, se da las gracias y a por el siguiente portal Marimar.

¿Ya tienes listo el disfraz? Pues venga, ponte la careta, engancha tu bolsa de Frankcicatrices y manda un whatsapp a la cuadrilla para quedar en la plaza.

¿Truco o trato?... Vamos a saquear un rato.